Periodismo // Una pequeña publicación que se volvió un gran medio

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Diciembre 2020 / 86

'Alternatives Economiques' nació hace 40 años en Francia como una gaceta de 16 páginas escrita por un único redactor. Hoy es una revista reconocida, con un equipo fuerte y renovado. Es el mejor modo de prepararse para el futuro.

Alternatives Economiques, proyecto inspirador y socio-colaborador de Alternativas Económicas, cumple 40 años. Han sido cuatro décadas de transformaciones para una revista que, desde el principio, tuvo la ambición de darle a la economía el lugar que merece en el debate ciudadano. La aventura empresarial se inició con una sola persona; después, con un puñado de amigos, y fue llegando a una audiencia cada vez más amplia en un contexto de cambios profundos en la prensa. Rememoremos la historia de una de las últimas cooperativas de prensa. 

La revista nació a finales de la década de 1980. No es casualidad. Según Serge Guérin, entre 1981 y 1991 se lanzaron en Francia 25 cabeceras de información económica. Sin saberlo, pues, el fundador, Denis Clerc, está en sintonía con su tiempo; ahora bien, en una onda distinta a la de la restante oferta de prensa económica, debido a su proyecto editorial (centrado en la pedagogía), a su público objetivo (la ciudadanía, el profesorado) y a sus recursos (la venta directa a los lectores y las suscripciones, más que la publicidad).

1980
Núm 1. Nov-dic
1984
Núm 20. Ene-mar
1986
Núm 40. Octubre
1991
Núm 87. Mayo
1994
Núm 113. Enero
1996
Núm 133. Enero
2001
Núm 195. Sept.

No se trata de un proyecto inventado por un grupo mediático a imagen de Capital o de Management, del grupo Prisma. Tampoco hay una personalidad conocida al frente del proyecto. La dinámica y las ideas corresponden a un equipo de personas que pertenecen a una misma formación, el Partido Socialista Unificado (PSU). Algunos, empezando por el propio Denis Clerc y también Yves Barou y Bernard Billaudot, frecuentan su comisión económica. Intercambian ideas, debaten, militan. Otros colaboran con la publicación rural y agrícola Germinal, caso de Daniel Lenoir. O bien escriben para Tribune socialiste, o para Témoignage chrétien. Así, en primer lugar, se dan proximidad de ideas y compromiso. Además,el grupo original se nutre de profesores o pedagogos (Dominique Plihon) y de altos funcionarios o personas a punto de convertirse en tal (Jacques Rigaudiat, Jean Pisani-Ferry). 

La publicación proyecta una mirada crítica sobre la sociedad, partiendo de los retos económicos. Contrariamente a la caricatura que se hará de la revista conforme va adquiriendo importancia, rechaza la idea de una gran alternativa revolucionaria. Se centra en la reflexión sobre cómo corregir los aspectos nefastos del capitalismo. Se apuesta por un realismo económico, sin renunciar al alclaje en la izquierda y a la voluntad de transformación social. La prensa se ve como una vía para lograrlo, vinculando información (hechos) y pedagogía (explicación, análisis). 

La aventura arranca lentamente. Denis Clerc lo hace todo un poco solo. Dedica el primer número a un fichero de 4.000 personas que ha podido recopilar. Como retorno obtiene 900 suscriptores, una cantidad suficiente como para preparar el segundo número, que sale a la calle dos meses más tarde. Un año después, ya cuenta con 2.500 abonados. La sede inicial está en Dijon, y con el tiempo se repartirá entre esta ciudad (diseño, suscripciones) y París, donde se ubica, entre otros departamentos, la redacción.

Los públicos de 'AlterEco'

El público al que se dirige el grupo fundador está formado, en primer lugar, por la ciudadanía (profesiones intelectuales, clase media) interesada en descifrar las cuestiones sociales y económicas y su vínculo con los problemas políticos. Un segundo grupo lo conforman militantes de la política, el sindicalismo y el asociacionismo, deseosos de formarse en materia económica. El profesorado, gremio al que pertenece Denis Clerc, es un tercer grupo, y también el que responderá mejor a los contenidos de Alternatives Economiques. Sin duda porque comparte los valores de la cabecera, y también aprecia la sobriedad en la forma y el precio bajo de la publicación. 

El proyecto editorial combina diversos compromisos y valores: el análisis crítico y la explicación de los mecanismos económicos (teoría y práctica), la afirmación del rol decisivo de la demanda y de las políticas para favorecerla, el acento en las preocupaciones sociales, el apoyo a la construcción europea, la puesta en valor de los valores ecológicos (en línea con Ivan Illich y André Gorz), así como la convicción de que de verdad existen alternativas. Se presta atención a la innovación económica y social, con el foco en la economía social y solidaria. 

Pedagogía y periodismo

Alternatives Economiques se convierte rápidamente en una publicación reconocida. Su avance reside en el equilibrio entre las voces expertas (teórica y práctica), el compromiso (político y asociativo), la pedagogía y el periodismo. Según las etapas, hay más carga de unos elementos que de otros. Más pedagogía al principio; más periodismo, sin abandonar el compromiso, hoy. El principio que ha dominado el proyecto ha sido dar prioridad a la oferta editorial dirigida a los lectores, por encima de enfoques orientados a la demanda de los anunciantes. 

Lanzada sin un plan de comunicación y sin dinero, la publicación crece deprisa. Desde 1985 se convierte en mensual. Al ir requiriendo más recursos humanos, de la forma inicial de asociación pasa a convertirse en cooperativa, de modo que los trabajadores codirigen la empresa, de la que son socios (una parte de su salario se les retiene cada mes a cambio de una participación social). Hay otros socios, pero los trabajadores, por estatutos, son mayoría y la cooperativa no se apoya en ningún millonario. El proyecto perdura gracias a sus suscriptores y, contrariamente a quienes cantan las virtudes del liberalismo, vive así plenamente en la economía de mercado.

La contratación de un redactor jefe en nómina, al principio a tiempo parcial, Philippe Frémeaux (fallecido el pasado agosto), permite acelerar su desarrollo, mientras Denis Clerc se concentra en la gestión de la empresa. Convertirse en una auténtica revista supone la diversificación de los contenidos, las secciones regulares y más firmas. 

En 1990 aumenta la paginación a 48 páginas. El incremento de la difusión lo permite. Los beneficios de este incremento es un tema de discusión recurrente. El número de lectores crece, sobre todo los ciudadanos que compran la revista en los quioscos. 

Es una apuesta ganadora: la década de 1990 es la del desarrollo, y la difusión pasa de 25.000 ejemplares a 95.000. Van ganando peso los espacios para el debate de ideas que articulan los retos económicos a las grandes cuestiones sociales. Y este es justamente el posicionamiento de Alternatives Economiques.

El 'boom' y en las escuelas 

La revista, destinada a la ciudadanía, encuentra en seguida lectores en las escuelas (profesorado, estudiantes). Philippe Frémeaux se vuelca en que ambos mercados se refuercen mutuamente. La redacción concibe herramientas adaptadas a la formación de unos y al aprendizaje de otros, con la revista, los extras y los suplementos. La idea es que el público escolar —que aporta volumen de difusión, da credibilidad y amortiza costes de producción— sea el punto de apoyo para dirigirse al público ciudadano, más difícil y más lento de alcanzar —y que aporta un mayor margen—. Es un círculo virtuoso que explica el éxito.

La sostenibilidad es, sin embargo, una lucha permanente. La dinámica del mercado publicitario, que experimenta crecimientos de dos dígitos en los años setenta y ochenta, se estanca en los noventa, antes de pasar a los números rojos. Y el mercado de las revistas es el segmento que más recula en la prensa escrita. En este contexto, las revistas centradas en las noticias se lanzan deprisa a la carrera digital, sin valorar lo bastante la pertinencia de abandonar la investigación de fondo en provecho de la actualidad más caliente. Se produce también un retraso en realizar auténticas inversiones editoriales, lo que se va a pagar muy caro entre el público más joven, que cada vez lee menos.

2019
Núm 394. Oct.
2020
Núm 400. Abril

Alternatives Economiques no escapa a estas tendencias de fondo, pese a que la publicidad ocupe un lugar menos importante en comparación con otras revistas de información económica. Sufre la disminución sustancial de los niveles de lectura y las dificultades en las redes de distribución. Las ventas empiezan a debilitarse a principios de este siglo y descienden más claramente a finales de la década de 2000. Esta erosión se confirma en la siguiente década. El número de suscriptores empieza a aumentar de nuevo en 2020.  

¿Cómo ha podido Alternatives Economiques continuar desarrollándose en estas condiciones? 

En primer lugar, aunque le lleva su tiempo, la revista se compromete  con la revolución digital. La primera página web creada por Alternatives Economiques ve la luz el primero de junio de 1999. Es una web escaparate de la revista impresa.

Revolución digital

El giro hacia el mundo digital se desarrolla en diversas etapas, pero el salto se produce realmente en el año 2014, con el lanzamiento de Alterecoplus. Se concibe un medio de comunicación digital como tal, con su contenido y su marca. El avance es prudente, por temor a la canibalización de la revista impresa y por el riesgo de dispersión de medios de la redacción, técnicos y financieros. Sin embargo, su periodicidad semanal va a contrapié de los modelos que se imponen, ya sean contenidos diarios o multiedición. Y la concepción de Alterecoplus pensada para la tableta declina en beneficio de los teléfonos inteligentes, y más entre los lectores jóvenes. En 2017, la experiencia de Alterecoplus como página autónoma termina, y los dos sitios de la revista se fusionan bajo la marca www.alternatives-economiques.fr.

En el plano editorial, la oferta digital debe encontrar su especificidad y su identidad. La redacción debe evolucionar, y la web reclama menos contribuciones de tipo omniomprensivo, es decir, reclama menos la necesidad de tratarlo todo  sobre un tema, y sí, en cambio, más reacciones a cuestiones ligadas a la actualidad. Sí mantiene lo que confiere fuerza al mensual en papel: análisis originales de una redacción experta, con capacidad para explotar las estadísticas y dar la palabra a voces menos visibilizadas por otros medios.

Además de pasar de ser una revista impresa a un medio con oferta doble impresa y digital, la publicación reserva cada vez más espacio a lo visual. El espacio dedicado a la imagen, a la fotografía, a los gráficos y a la infografía progresa. Todo lo que ayuda a la lectura, como los recuadros y las viñetas, se despliega. Al cabo de los años, irrumpe el concepto de storytelling, así como la información que pueda favorecer a la vez la exposición (explicación de los hechos) y la capacidad de captar la atención de un público más vasto, no iniciado en economía, pero interesado por los retos económicos y sociales. Alternatives Economiques ha debido aprender a combinar la notoriedad de algunos intelectuales reconocidos con coberturas atractivas presentadas en los expositores de quioscos y establecimientos de venta.

Evolución del público lector

Este movimiento es coherente con la transformación de los lectores. Al público comprometido y politizado de los orígenes le suceden ciudadanos atraídos por los retos y la necesidad de descifrar la economía, que buscan más color y más ilustraciones. En este sentido, la publicación actual es la versión más exitosa de una revista que combina la comprensión del mundo y el placer de la lectura sobre cuestiones económicas. Incluye experiencias editoriales como la de Oblik, un auténtico laboratorio de expresión visual que explora formas de ilustraciones hasta entonces inéditas en la revista, con poco texto. El análisis pasa a los gráficos, los cuadros y las infografías.

Al hablar del futuro de Alternatives Economiques hay que plantearse dos cuestiones: la obligación de hacer frente a las incertidumbres actuales —como el retroceso de la prensa escrita y de la publicidad— y un relevo generacional en los equipos de todos los departamentos de la sociedad cooperativa. Una nueva organización se ha puesto en marcha hacia la profesionalización, y prepara el futuro de la revista.

Próxima generación

Salir del redil de los fundadores supone un momento importante para muchas pymes. Es un proceso que los lectores no ven, pero que, con éxito o sin él, determina el resto de la aventura empresarial.En Alternatives, este proceso se inició hace varios años. Con la marcha del exredactor jefe Guillaume Duval, únicamente la presidencia del consejo de administración recae sobre un representante, el último, de la figura del experto-periodista: Christian Chavagneux, cuya carrera se ha desarrollado mayoritariamente en la redacción desde 1990. La dirección general la ocupa un perfil de joven gestor, que procede el universo de las start-ups y que conoce el terreno de la financiación (Jeremy Dousson).

La revista inició hace ya unos años el relevo generacional, que condiciona el futuro de todo el proyecto

La dirección de la redacción la forma un trío compuesto por tres periodistas: un director (Laurent Jeanneau) y los dos redactores jefes, para el digital (Sandrine Foulon) y para la versión impresa (Marc Chevallier). De la secretaría de redacción se encarga Charlotte Chartan. El relevo se produce igualmente en el equipo que se ocupa de las funciones de apoyo, como el marketing y relaciones con los clientes (Frédéric Desiles y  Stéphanie Claudel). 

Para la redacción se ha contratado a cuatro jóvenes periodistas de menos de 30 años. La cohesión y el dinamismo del equipo redaccional, que se ha vuelto más homogéneo, es la base del relevo generacional. Hoy son mayoría los miembros de la redacción que nunca han trabajado de forma directa con el fundador. Allí donde en el pasado pesaban más la experiencia y la reputación de unas pocas personalidades que otorgaban el prestigio a la revista, la figura del experto da paso al periodista de formación y de profesión. Pero no se trata de periodistas cualesquiera, sino de profesionales especializados en economía, temas sociales y cuestiones medioambientales. El cuadro editorial de Alternatives Economiques representa un modo de ejercer el periodismo muy buscado. Una oportunidad para atraer a profesionales de calidad. ¡Y a lectores comprometidos!